Dice el dicho “hacienda no es tonta” y es que es así, y hoy en día es muy fácil programar sus ordenadores para que detecten aquellas incongruencias por las que “no les cuadran las cuentas”.
Por ejemplo:
- Perder dinero durante más de tres años. No es normal que un negocio pierda dinero durante más de 3 ejercicios, ¿de qué vive el titular?. Es verdad que en contadas ocasiones es cierto, y resulta el cónyuge tiene un buen empleo y están “aguantando” para ver si vienen tiempos mejores.
- Solicitar devolución de IRPF o IVA. A hacienda no le gusta devolver dinero, y cuando le pedimos que nos lo devuelva, lo normal es que quiera asegurarse que eso es así, por lo que lo más probables que nos regale con una comprobación limitada.
- Cruce de datos con los modelos trimestrales y anuales, e informativas, como el 347. Este nunca falla, en cuanto no cuadren hay comprobación segura.
- No declarar una subvención.
- El margen de beneficio no cuadra con su sector. Hacienda tiene información de la media del margen de beneficio que tienen los bares, peluquerías,… informar de una ganancia inferior a la media es objeto de inspección.
- Imputarse el titular del negocio un beneficio o nomina inferior a los de sus empleados.
- Solicitud del nif intracomunitario o inclusión en la devolución mensual del iva. Todas estas solicitudes son objeto de comprobación